"El mundo no se hizo en el tiempo, sino con el tiempo"

San Agustín

martes, 4 de diciembre de 2012

El espejo rampante- una crónica.

Vino, vio y venció.
Así lo resumiría yo.
Se preparó con tiempo y pausa, pensado y maquinado, sin dejar nada al azar aunque pareciese lo contrario. La falsa desorganización lo resolvió todo como debía ser, un alegato de desahogo en estos tiempo que corren. Convulsos y malditos tiempos en que la palabra "crisis" se ha profanado, siendo refugio de aprovechados que han hecho de ella su "agosto", empeorando si cabe, el vivir de la gente normal de la calle.
Se trató de una reunión de gente que quiso explayarse contra la crisis de la mejor manera que sabía: leer sus escritos, o escritos de alguien que ellos consideraban merecedor de ello. Y todo "contra" la crisis y la situación actual. Y fue genial. Espontaneo y grácil, nada pesado, mantuvo a su aceptable público, desde el más erudito al más cazurro, todos tenían cabida en el evento, pues todos lo entendían al más mínimo detalle, clavados en su sitio. Y los participantes, de la localidad y alrededores, salían uno tras otro con los más diversos textos. Ahí estaba la gracia, señores, ahí estuvo.

Eventos tales son raros de hallar, y cuando se encuentran bien planificados como fue el caso, merece la pena asistir a algo tan fuera de lo común. Y con una copita en la mano mejor que mejor.  Si encima lo aderezamos con una estupenda música en directo (sí, como leen, en directo riguroso) que acompañaba el recital, las quejas a la situación actual, cuentos de la actualidad, de problemas sociales variados, una rebelde poesía, transgresores disonancias, un canto a la libertad que revuelve el corazón y despierta la mente, etc, etc, todo ello lo convirtió en el acontecimiento ideal para una época convulsa como la presente.
Enhorabuena a los participantes, a los que se atrevieron a demostrar que, con la palabra, también se puede salir de la crisis. Pero, sobre todo, a la idea y al creador, uno más entre todos, aunque especial por llevar a cabo lo que muy pocos se atreven.
Felicidades, Álibe.

http://demarco.blogia.com/2012/112601-el-espejo-rampante.php

2 comentarios:

  1. El movimiento sólo se produce si existe voluntad, veracidad y estímulo.

    Un fuerte abrazo, Javi. Mis agradecimientos.


    Álibe.

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